La Unidad de Crisis de la región, que coordina la respuesta a la epidemia de esta zona del norte del país, elaboró un protocolo para determinar qué pacientes recibirán tratamiento en cuidados intensivos y cuáles no ante la falta de espacio, informaron medios italianos.
A medida que la epidemia continúa propagándose, la capacidad de cuidados intensivos se está agotando en Italia. Hasta el momento, Lombardía es la región más afectada. Pero el brote se está ampliando rápidamente a la región vecina de Piamonte, cuya capital es Turín.
Por eso, las autoridades están tomando recaudos. Según el documento, producido por el departamento regional de la Protección Civil y adelantado por el diario británico The Telegraph, “
También se considerará la capacidad del paciente para recuperarse de la reanimación, según el documento. “El crecimiento de la epidemia actual hace probable que se alcance un punto de desequilibrio entre las necesidades clínicas de los pacientes con COVID-19 y la disponibilidad efectiva de recursos intensivos”, se lee en el texto.