El pasado lunes Turquía y Siria vivieron unos de los terremotos más fuertes de la falla geológica de Anatolia oriental, el primero de 7.8 grados y el segundo de 7.6 grados. Tras esta catástrofe la Unión Europea y diferentes países como México, El Salvador, Palestina, Rusia, entre otros han mandado ayuda humanitaria para las labores de rescates.
El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, ha declarado estado de emergencia durante tres meses en las 10 provincias más afectadas y siete días de duelo nacional. Por su parte el presidente sirio, Bashar al-Ásad, realizó una reunión de emergencia del Consejo de Ministros para examinar los daños que el terremoto ha ocasionado en el país.
En total, las autoridades han comunicado 8.264 fallecidos y 39.364 heridos, aunque esta cifra irá aumentando con el pasar de los días. Si bien Siria y el sur de Turquía han sido los territorios más afectados por el terremoto, este también afectó a países como Líbano y Chipre, así como en Gaza, de acuerdo con información de la BBC.
