Tras el acuerdo entre la administración de Claudia Sheinbaum y la de Donald Trump de ponerle una pausa a los aranceles, el gobierno mexicano puso en marcha el Operativo Frontera Norte para desplegar 10 mil elementos de la Guardia Nacional y el Ejército, que provienen de distintos puntos del país, para reforzar la seguridad de la frontera norte.
Estos elementos reforzarán a las tropas ya desplegadas en la frontera con la finalidad de detener el flujo de fentanilo, otras drogas, y la migración irregular hacia los Estados Unidos. De igual forma, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), señaló que las tropas evitarán la introducción de armamento procedente de la Unión Americana.

Por último, Sheinbaum aseguró que los elementos de la Guardia Nacional que vigilarán la frontera norte vienen de regiones del sur o de zonas que no tienen tantos problemas de seguridad. “Es un despliegue que no deja sin seguridad al resto del país (…) no es que estemos dejando descubierto los estados de la República, ni mucho menos, es una reorientación de las fuerzas”, declaró.