En el marco del Día Mundial de los Derechos Humanos, el gobernador electo de Puebla Alejandro Armenta, reiteró su compromiso con la construcción de un México más justo e inclusivo: “En Puebla, donde más de 600 mil personas hablan lenguas originarias como el náhuatl y el totonaco, trabajaremos para garantizar su bienestar, respetando sus territorios, fortaleciendo sus instituciones y promoviendo su participación activa en la construcción de un futuro sostenible”.
Con base en estos compromisos, el gobierno entrante ya ha compartido diversas propuestas enfocadas en mejorar la calidad de vida de todos los y las poblanas, pero más específicamente de las personas que históricamente han padecido una mayor situación de vulnerabilidad. De esta manera, informó que desde el primer día de su administración, en Puebla se promoverán acciones para el acceso universal a servicios básicos de salud, educación y vivienda; el respeto a las tradiciones de las comunidades, y proyectos económicos sostenibles que respeten el medio ambiente y las identidades locales.
Aunado a ello, compartió que cada una de las iniciativas estatales contribuirán con los proyectos nacionales impulsados por la presidenta Claudia Sheinbaum, quien desde el mes de octubre firmó dos decretos fundamentales para la consolidación de los derechos de los pueblos originarios y comunidades afromexicanas: La traducción a lenguas indígenas de la Reforma Constitucional que reconoce y garantiza los derechos de estos pueblos y comunidades, al igual que la creación de la Comisión Presidencial para el Seguimiento y Atención de Planes de Justicia, dirigidos a estos grupos.
Con estas acciones, los diferentes niveles de gobierno continúan demostrando su compromiso con el cumplimiento de los principios transformadores de justicia social, inclusión y sostenibilidad, reconociendo a los pueblos originarios como pilares del tejido social y cultural del país.
